- El FMI concluyó su examen intermedio de los criterios de acceso de México a la Línea de Crédito Flexible (LCF), originalmente aprobada el 19 de noviembre de 2021 con un nivel de acceso de alrededor de USD 50 mil millones.
- México continúa cumpliendo con los requisitos de acceso a la LCF en virtud de la gran solidez de los fundamentos y marcos institucionales de política económica y la trayectoria de desempeño económico e implementación de políticas.
- En vista del aumento de los riesgos externos desde que entró en vigor el acuerdo, las autoridades mexicanas han optado por no solicitar una reducción del nivel de acceso durante este examen, pero mantienen su firme compromiso de buscar una vía gradual de salida, lo que dependerá de la evolución de los riesgos externos. Las autoridades tienen la intención de seguir asignando al acuerdo carácter precautorio.
El 16 de noviembre de 2022, el Directorio Ejecutivo del Fondo Monetario Internacional (FMI) concluyó el examen para determinar que México reúne los requisitos para el acuerdo en el marco de la Línea de Crédito Flexible (LCF) y reafirmó que el país continúa satisfaciendo los criterios de acceso a los recursos de la LCF. El Directorio Ejecutivo del FMI aprobó el 19 de noviembre de 2021 el acuerdo vigente conferido a México en el marco de la LCF por dos años y un monto equivalente a DEG 35,650.8 millones –lo que equivale a un 400 por ciento de su cuota y unos USD 50 mil millones– 1 (véase el Comunicado de Prensa No. 21/340 ). Las autoridades mexicanas manifestaron su intención de asignar al acuerdo carácter precautorio.
Al término de las deliberaciones del Directorio Ejecutivo sobre México, la Sra. Antoinette Sayeh, Subdirectora Gerente y Presidenta Interina del Directorio, declaró lo siguiente:
“La recuperación de México de la pandemia está encaminada, pero un entorno externo más turbulento, el aumento de la inflación mundial y el endurecimiento de las condiciones financieras mundiales, así como la desaceleración de la actividad económica en Estados Unidos, plantean nuevos desafíos y riesgos para su recuperación. Sin embargo, la economía ha demostrado resiliencia gracias a la gran solidez de las políticas y los marcos de políticas institucionales, incluidos un régimen de tipo de cambio flexible, un marco creíble de objetivos de inflación, una ley de responsabilidad fiscal y un sector financiero bien regulado.
La economía mexicana sigue expuesta a riesgos externos. El aumento de la inflación en el mundo desató medidas de endurecimiento monetario y una mayor aversión mundial al riesgo, lo que amenaza al crecimiento. Varios factores ensombrecen las perspectivas: entre ellos, los riesgos elevados de una desaceleración en las economías avanzadas, el endurecimiento desordenado de los mercados financieros mundiales, la invasión rusa a Ucrania, la desaceleración de China y las variaciones de precios de las materias primas. La Línea de Crédito Flexible (LCF) continuará siendo un instrumento importante de apoyo a la estrategia macroeconómica de las autoridades al ofrecer un seguro frente a los riesgos extremos y apuntalar la confianza del mercado.
Las autoridades tienen una trayectoria de sólida gestión de las políticas y están firmemente comprometidas a mantener políticas prudentes en el futuro. A raíz de los mayores riesgos externos, han decidido mantener el nivel actual de acceso, pero han ratificado su compromiso de buscar una vía gradual de salida, lo cual dependerá de la evolución de los riesgos externos. Las autoridades tienen la intención de seguir tratando el acuerdo con carácter precautorio.”
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